Cómo cortar cebollas sin llorar

Las cebollas son una de las hortalizas que más molestas nos resultan al manipularlas. Al cortarlas estas liberan una sustancia que al entrar en contacto con el aire genera unos gases que nos provoca el típico lagrimeo. Para evitar este mal rato existen varios trucos:

• Pelar y cortar la cebolla debajo del grifo para evitar que se liberen sus gases y, así, prevenir el lagrimeo.
• Introducir la cebolla dentro del congelador durante unos minutos o en la nevera durante una hora. Cuando la cebolla está fría esta libera muchos menos gases.
• Empapar el cuchillo con zumo de limón ya que el ácido provoca una reacción que hace que la cebolla suelte menos sustancias.