Las anchoas son un producto muy consumido en forma de tapas o deliciosos entrantes. Su carne es muy sabrosa y aromática y tienen un intenso sabor. Este pescado es el producto resultante del tratamiento en salazón o aceite del boquerón.
El boquerón es un pescado azul que posee grandes propiedades beneficiosas para nuestro organismo. Entre los nutrientes destacan las proteínas de alto valor biológico, ácidos grasos omega 3, que contribuyen a disminuir los niveles de colesterol de la sangre; y vitamina A y B.
También destaca su gran contenido en minerales como magnesio, fósforo, hierro y selenio. Al consumirlas enteras también aprovechamos buena cantidad de calcio gracias a sus espinas.
Todo y su gran sabor, hay que tener especial cuidado con el Anisakis, un parásito de color blanquecino parecido a un gusano. La anchoa es uno de los pescados que tiene más riesgo de ser contaminado por este. Si se consume un pescado infectado por Anisakis, podemos sufrir trastornos digestivos y reacciones alérgicas, muchas de ellas graves.
Como otras conservas, las anchoas contienen grandes cantidades de sodio, por este motivo no se recomienda el consumo a personas que tienen hipertensión. No obstante, hay un truco rápido para eliminar la sal de este producto:
Imagen: Jun Seita from Palo Alto, CA, U.S. (7 Portes) [CC BY 2.0], via Wikimedia Commons
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